Por José Sobrevilla
Recientemente, el 5 de octubre, el Canciller Marcelo Ebrard hizo entrega del primer pasaporte electrónico mexicano en la Delegación Coyoacán y en el Consulado General de México de Los Ángeles, ciudades donde inició la transición hacia el nuevo documento que contará con un chip que almacena, de manera electrónica, la información de la persona que lo posea, y que será un documento seguro, moderno y estandarizado internacionalmente; también agilizará la entrada en puertos fronterizos, según anunciaron los funcionaros gubernamentales.
El documento es parte de una instrucción del presidente Andrés Manuel López Obrador al Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, –reconocieron– y para su elaboración se llevaron dos años de trabajo con las estrictas normas de transparencia y con el acompañamiento de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops); también de la Secretaría de la Función Pública, detalló personal de la cancillería en comunicado.
Al explicar la trascendencia de esta transición, Ebrard informó que “La forma en que podemos contribuir (a las conmemoraciones de los 200 años de vida independiente de México) es con esto que tiene que ver con cada persona, que esté más segura; que la imagen de México sea mucho mejor en el exterior; y que podamos proteger a los menores, a las personas con discapacidad”.
El documento seguirá siendo impreso en libretas físicas, pero incluirá además una lámina de policarbonato y un chip en donde se almacenará electrónicamente la información de cada persona. Cambios que no implicarán un aumento en el precio del mismo, “pero sí un mayor reconocimiento internacional del documento, dificultando la suplantación de identidad de las personas y, al mismo tiempo, proyecta a nivel internacional la imagen de México”.
En la primera hoja de papel, para los menores de edad, este pasaporte añadirá una impresión a color, que contendrá la información de la persona que ejerza la patria potestad sobre el infante. “El canciller hizo énfasis en la ‘innovación’, ya que es el primer documento oficial en presentar dicha información, y protegerá correcta, adecuada y plenamente a las y a los menores, pero también a las personas que tengan discapacidad, que no pueden valerse por sí mismas, ya que quien tenga la tutela podrá aparecer en el documento”.
Carlos Candelaria, director general de Oficinas de Pasaportes, señaló que para llegar a este resultado: “Nuestro andar fue desde la celebración de una transparente licitación en la que nos acompañó la Unops y la Secretaría de la Función Pública, dándole seguridad jurídica a la misma, continuando con los trabajos conjuntos con el consorcio adjudicado que permitió la incorporación de nuevas tecnologías para dotar al servicio público de mayor eficiencia en sus procesos operativos y normativos”.
Como marcan todavía los protocolos de salud, el acto de entrega se hizo mediante enlace en vivo y acompañados por la cónsul general de México en Los Ángeles, California, Marcela Celorio Mancera, con el director general de Servicios Consulares, Jaime Vázquez Bracho Torres. Fue ahí que se entregaron los primeros cinco pasaportes electrónicos mexicanos en el exterior a jóvenes que son beneficiarios del programa Deferred Action for Childhood Arrivals (DACA).
Se dijo que, a partir del martes 5 de octubre, será implementado el plan de transición para la adopción del pasaporte electrónico en todas las oficinas consulares de México en el exterior que expiden el documento en sede. El plan concluirá en enero de 2022 cuando ya todas estas oficinas puedan emitirlo.
Por el evento de la Ciudad de México acompañaron la transmisión el titular de Administración y Finanzas de Relaciones Exteriores, José Antonio Domínguez Carballo; el jefe de la Oficina del Secretario de Relaciones Exteriores, Daniel Millán Valencia; el director general de Asuntos Jurídicos, César García Mondragón; el director general de Bienes Inmuebles y Recursos Materiales, Juan Carlos Mercado Sánchez; el director general de Comunicación Social, Esteban González Mancha; el coordinador de Infraestructura y Operación Tecnológica de la Dirección General de Tecnologías de Información e Innovación, Benjamín Saavedra Lira; y por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el director general de Talleres de Impresión de Estampillas y Valores, Sergio Omar Blanco Ramírez.
– ¿Cómo se puede obtener el pasaporte electrónico?
Lo primero que se debe hacer es una cita en la página oficial de la Secretaría de Relaciones Exteriores o al teléfono 800 8010 773 (de lunes a viernes de 09.00 a 18.00 y sábados de 09.00 a 14.00); pero antes de asistir hay que realizar el pago correspondiente, llenar el formato de solicitud de pasaporte y acudir con todos los documentos necesarios a la delegación u oficina que se haya elegido durante el proceso de cita.
– ¿Cuánto costará?
Según la cancillería, el precio del pasaporte electrónico será el mismo de 2021 y, de acuerdo con la página de la Secretaría de Relaciones Exteriores, los precios son 1.345 pesos con una vigencia de tres años, 1.845 pesos por seis, 2.840 pesos por 10 años. Además, los adultos mayores, los trabajadores agrícolas y las personas con discapacidad tendrán un 50% de beneficio, descuento, en su expedición.
Un poco de historia
Fue hasta el reinado de Luis XIV de Francia que las cartas de solicitud o salvoconductos se popularizaron para transitar libremente entre uno y otro reino. Les llamaban “passe port”, que significaba “pasa puertos” o “pasa puertas”, y desde entonces se les quedó el nombre. Posteriormente ya casi todos los países europeos habían implementado un sistema de pasaportes y de visas emitidas por los países que se deseaba visitar. “Pero la popularidad de los viajes en tren, a partir de mediados del siglo XIX, crearon un caos en el sistema, por lo que, en 1861, Francia abolió los pasaportes y las visas y pronto el resto de los países europeos hicieron lo mismo; siendo hasta 1914, cuando prácticamente todo Europa había adoptado estas medidas”[1].
Después, la Primera Guerra Mundial provocó que la seguridad nacional volviera a ser tema y las visas y pasaportes volvieron a ser obligatorios, ha señaldo Marisa Zannie (El Universal/31/03/2020) y, en 1920, la Sociedad de las Naciones llevó a cabo una reunión sobre los mismos, formalidades de aduana y boletos para viajar entre países, a la que llamó la “Conferencia de París”; y actualmente la Organización de Aviación Civil Internacional es quien emite las normas sobre pasaportes, que son consideradas “recomendaciones” para los gobiernos locales.
¿Sabía usted que hasta 1950, el pasaporte mexicano servía únicamente para viajar a Estados Unidos? la verdad, este reportero no. Sin embargo, el pasaporte, como todos sabemos, es el documento con validez internacional que expiden las autoridades de un país, y que acredita una autorización legal para ingresar o salir de su territorio a través de los cruces en las fronteras, los puertos o los aeropuertos internacionales y es el único documento expedido por la federación que es aplicable a toda la población, tanto niños como jóvenes y adultos. Sin embargo, su uso frecuente se empezó a dar a principios del siglo XX, porque apenas hace cien años, los aristócratas y los diplomáticos eran únicamente quienes podían desplazarse libremente de un país a otro.
Si bien permite la libre movilidad de una nación a otra, algunos países como Estados Unidos, para entrar a su territorio requieren que el visitante presente una “Visa”, que es un permiso para poder visitarlos, claro, si tu país forma parte del listado que cada gobierno determina.
Existen tres tipos de pasaporte. El ordinario (verde) que es expedido para todos los ciudadanos que desean hacer viajes ordinarios de negocios o vacaciones. El oficial (gris) que lo expiden únicamente para los legisladores y directivos de áreas de las diferentes órdenes de gobierno representando a México en viajes oficiales; y el diplomático (negro) que es utilizado por los diplomáticos del Servicio Exterior Mexicano y cargos de jerarquía mayor como el Presidente de la República así como a sus familiares.
Desde 2010, todos los pasaportes mexicanos, son biométricos; y todos los solicitantes deben tener su fotografía tomada (Anchura: 35mm, altura: 45mm; altura de la cabeza –hasta la parte superior del cabello–: 34.5mm; distancia desde la parte superior de la foto hasta la parte superior del cabello: 4.5mm), además de las diez huellas digitales escaneadas, y el iris escaneado. Aunque los pasaportes mexicanos son biométricos, no poseían un chip RFID como el que ahora se está expidiendo.
Mas curiosidades:
- Todavía en la década de los 60 del siglo pasado, los pasaportes mexicanos no tenían fotografía
- Siendo el francés el idioma de la diplomacia, en 1920, durante la Conferencia de París de la Sociedad de las Naciones, se decidió que todo pasaporte debería ser escrito en francés más un segundo idioma, como mínimo. Por eso, todo texto escrito en el pasaporte mexicano se encuentra en español, inglés y francés.
- El pasaporte mexicano ha sido el 26 más poderoso en el mundo, pues nos permite visitar 158 países.
- El más poderoso en el mundo es el japonés, que permite entrar a 191 países sin necesidad de tramitar una visa u obteniéndola al llegar al destino.
- En contraste, el menos poderoso del mundo es el de Afganistán, que únicamente permite la entrada irrestricta a 26 países.
- En el mundo, el nuevo pasaporte de Nicaragua ha incluido 89 medidas de seguridad, lo cual lo convierte en uno de los documentos más difíciles de falsificar.
Esta es una opinión personal del columnista
Elaborado con información de: https://es.wikipedia.org/wiki/Pasaporte_mexicano; y
[1] https://www.eluniversal.com.mx/destinos/historia-y-curiosidades-del-pasaporte-en-mexico-y-en-el-mundo Consultado el 07.10.2021