- /

Con información de EFE | Londres. | 04 Ene 2025 - 10:20hrs

Un ciudadano británico murió en el atropellamiento sucedido el día de Año Nuevo en Nueva Orleans (Estados Unidos), informó la Policía Metropolitana de Londres (MET).

La víctima, identificada como Edward Pettifer, de 31 años y residente en el barrio londinense de Chelsea, murió en el atentado en Bourbon Street, y tanto la MET como el Ministerio de Exteriores británico confirmaron que se encuentran actualmente dando apoyo a su familia y en contacto con las autoridades estadounidenses para la repatriación del cuerpo a Reino Unido.

“Toda la familia está devastada por la trágica noticia de la muerte de Ed en Nueva Orleans”, dijeron los parientes de Pettifer en un comunicado, donde calificaron al joven como un “maravilloso hijo, hermano, nieto, sobrino y amigo de muchos” y pidieron llorar su pérdida en privado.

Según la agencia de noticias británica Press Association (PA) el forense de Nueva Orleans informó de que la causa preliminar de la muerte de Pettifer fueron “heridas por fuerza contundente”.

Otros medios británicos como ‘The Telegraph‘ indicaron que Pettifer era el hijastro de Tiggy Legge-Bourke, la que fuera niñera de los príncipes William y Harry entre 1993 y 1999.

El rey Carlos III de Reino Unido expresó su “profunda tristeza” por la muerte de Edward Pettifer.

Según informan medios británicos como BBC, citando fuentes oficiales del Palacio de Buckingham, el monarca se ha puesto en contacto con la familia del hombre para trasladarle sus condolencias tras conocer la noticia a través de “canales oficiales”.

Autoridades estadounidenses han confirmado 14 muertos y al menos una treintena de heridos por el sospechoso, identificado como Shamsud-Din Jabbar, que arrolló con una camioneta a a una multitud que se encontraba celebrando en la calle el inicio del nuevo año.

El varón, de 42 años y originario de Texas salió del vehículo y disparó un arma, antes de ser asesinado por la Policía.

Por el momento, el FBI cree que Shamsud-Din Jabbar actuó solo en un acto “premeditado y malvado”, aunque confirmó que en el interior del automóvil había una bandera del Estado Islámico y varios explosivos.