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Noreste | Coatzintla | 16 May 2025 - 13:40hrs

Entre 2014 y 2017, Lorena López Velázquez ocupó el cargo de síndica municipal, es decir, fue una de las principales responsables de cuidar el dinero del pueblo, de vigilar que se gastara bien, de revisar que no hubiera irregularidades.
Pero lo que terminó ocurriendo fue todo lo contrario.
Según el Órgano de Fiscalización Superior del Estado de Veracruz (ORFIS), durante su administración —encabezada por el entonces alcalde César Ulises García Vázquez—, se detectó un presunto daño patrimonial por más de 3 millones 385 mil 943. 06 pesos, correspondientes al ejercicio fiscal 2016. No se trató de un error menor. Se trató de observaciones graves, claras, y documentadas.
Para ser más claros: ese dinero no apareció o no se pudo justificar debidamente. Y nadie hasta ahora ha salido a dar la cara. Ni el alcalde, ni la síndica, ni ningún funcionario de esa administración.
¿Y qué hizo Lorena López Velázquez frente a ese señalamiento?
Nada. No lo aclaró. No lo enfrentó. Y hoy, sin ninguna explicación, pretende regresar.
Ahora quiere ser presidenta municipal de Coatzintla. Quiere volver a tener el control de los recursos, del presupuesto, de las decisiones. Y lo hace sin haber rendido cuentas, sin pedir disculpas y, por supuesto, sin asumir ninguna responsabilidad por lo ocurrido.
La lógica es sencilla: quien fue cómplice del desorden, no puede prometer orden.
Quien no cuidó el dinero del pueblo, no merece volver a tocarlo.
Durante su gestión, las irregularidades financieras fueron tan evidentes que el propio ORFIS emitió un dictamen técnico con observaciones por:
● Contratos sin comprobar.

● Gastos sin documentación.

● Y adjudicaciones sin los requisitos legales.

Y aún así, hoy vuelve a pedir el voto.
Pero esta vez, la ciudadanía está más despierta. La gente sabe que la intención de algunos no es servir, sino servirse. Que lo que está en juego no es solo una elección, sino el destino de nuestros recursos, de nuestras calles, de nuestras escuelas, de nuestro futuro.
Lorena López no viene sola. Es parte del mismo grupo político que ha controlado el municipio durante años.

Viene del mismo equipo que hoy deja una administración cuestionada, señalada y agotada.
Y quiere continuar ese cacicazgo con una nueva cara, pero con las mismas manos.
El pueblo de Coatzintla ha sido paciente, pero no es ingenuo.
Sabe quién ha trabajado por el bien común, y quién solo se ha beneficiado en silencio.
Sabe quién camina con la gente, y quién aparece solo en campaña.
Y también sabe que ya es hora de romper el círculo.
Porque no se puede permitir que quienes ya fallaron, vuelvan a intentarlo como si aquí no hubiera memoria.
Lorena López tuvo su oportunidad.
Y no solo no cumplió… También dejó cuentas pendientes.