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INAH Nayarit investiga la antigua industria lapidaria de Aztatlán
Desde 2022, este proyecto se ha enfocado en el uso de la caolinita y rocas similares por parte de la antigua cultura Aztatlán (850/900-1350 d.C.), una civilización que floreció en el Pacífico noroccidental mesoamericano.

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Noreste | Nayarit | 09 Jul 2025 - 12:03hrs

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Centro INAH Nayarit, está llevando a cabo un exhaustivo estudio interdisciplinario para desentrañar los misterios de la industria lapidaria prehispánica en la costa central de Nayarit.

Desde 2022, este proyecto se ha enfocado en el uso de la caolinita y rocas similares por parte de la antigua cultura Aztatlán (850/900-1350 d.C.), una civilización que floreció en el Pacífico noroccidental mesoamericano.

Hace más de mil años, en las ricas tierras bajas de Nayarit, los pobladores de Aztatlán se especializaron en la producción de una gran variedad de objetos suntuarios, rituales, funerarios y utilitarios. Estos artefactos eran manufacturados a partir de rocas arcillosas del grupo de la caolinita, producto de la alteración hidrotermal. Los principales yacimientos de este mineral se localizan al oriente y sur de la actual localidad de Yago, en los lomeríos que conectan la planicie aluvial con el piedemonte de la Sierra Madre Occidental.

El sitio arqueológico de Amapa ha emergido como la clave para entender cómo las poblaciones costeras de Aztatlán transformaron esta materia prima. En depósitos culturales que datan del Posclásico Temprano y Medio (900-1350 d.C.), se han documentado talleres artesanales especializados. De estos talleres se han recuperado numerosos objetos, incluyendo una diversidad de cuentas, pendientes, vasos trípodes (simples o decorados con efigies antropomorfas o zoomorfas), y malacates (lisos o con intrincados diseños simbólicos).

Bajo la coordinación del arqueólogo e investigador del Centro INAH Nayarit, Mauricio Garduño Ambriz, el proyecto, aunque en sus etapas iniciales, ya ha logrado importantes avances. Una de sus líneas de investigación centrales es la localización, mapeo y recolección de muestras de las materias primas utilizadas en la manufactura de los artefactos.

Estos trabajos cuentan con la valiosa participación de Ricardo Sánchez Hernández, geólogo e investigador de la Subdirección de Laboratorios y Apoyo Académico del INAH, quien está a cargo del estudio geoquímico y mineralógico de estas rocas para su identificación geológica.

Hasta la fecha, los trabajos de prospección arqueológica, respaldados por el artista plástico Julio López Escobedo (originario de Yago), han permitido localizar dos importantes yacimientos de rocas de origen hidrotermal: «El Chicale» y «Las Iglesias». Ambos se encuentran dentro de las demarcaciones de los ejidos de Yago y El Tambor, respectivamente, en el municipio de Santiago Ixcuintla.

Próximamente, el estudio avanzará con el análisis crono-tipológico de los artefactos de caolinita y rocas afines, como la dickita. Esto implicará el examen de diversas colecciones científicas y del corpus de artefactos resguardados en la bodega de bienes culturales del Museo Regional de Nayarit. Además, se llevarán a cabo estudios detallados sobre las técnicas de manufactura mediante microscopía electrónica de barrido para identificar huellas, estrías y patrones de desgaste en los objetos.

En un esfuerzo paralelo y colaborativo con Julio López Escobedo quien es la única persona en la región que aún trabaja artesanalmente la caolinita y rocas similares, utilizando técnicas tradicionales de percusión, desgaste y abrasión, el arqueólogo Garduño Ambriz planea desarrollar una línea de investigación de arqueología experimental. El objetivo es replicar las posibles cadenas operativas de producción para manufacturar diversos objetos (cuentas, pendientes, malacates, vasijas, etc.) utilizando materiales locales como rocas, arenas abrasivas, buriles y perforadores de calcedonia y cuarcita.

El director del Centro INAH Nayarit, Othón Yaroslav Quiroga García, destacó que los resultados de esta investigación serán fundamentales para diseñar y montar una exposición temporal sobre la industria lapidaria de la caolinita en la entidad, la cual tendrá como sede el Museo Regional de Nayarit. Este proyecto promete arrojar nueva luz sobre la riqueza cultural y tecnológica de las civilizaciones prehispánicas de Nayarit.