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Con información de López-Dóriga Digital | Ciudad de México. | 09 Sep 2025 - 11:42hrs
Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, defendió el Paquete Económico 2026, entregado en la previa por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a la Cámara de Diputados, a casi dos horas del límite legal para su presentación.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, Sheinbaum Pardo dejó en claro que los incrementos propuestos de impuestos en 2026 a bebidas azucaradas, tabaco y videojuegos violentos no se tratan de una medida recaudatoria, sino de salud y de atención a problemas sociales.
Según el Paquete Económico 2026, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a las bebidas saborizadas se duplicará hasta los 3,08 pesos por litro, incluyendo aquellas con endulzantes no calóricos.
En el caso del tabaco, la tasa aumentará de 160 a 200 por ciento, con un incremento gradual de la cuota específica hasta 2030 y la incorporación de nuevos productos como las “bolsas de nicotina”.
Además, plantea un impuesto especial de 8 por ciento a los servicios digitales de videojuegos violentos y un alza en el gravamen a las casas de apuestas en línea, que pasará de 30 a 50 %.
“Hemos estado hablando aquí del daño que provocan las bebidas azucaradas. Es una decisión no recaudatoria, sino lo que tiene que ver con la salud de las y los mexicanos”, sostuvo durante su conferencia matutina.
La mandataria añadió que los recursos generados se destinarán a un fondo especial para atender enfermedades vinculadas con el consumo de refrescos y tabaco, como la diabetes y la obesidad.
En el caso de los videojuegos, explicó que el impuesto responde a preocupaciones de seguridad y al impacto que algunos contenidos violentos pueden tener en niñas, niños y adolescentes.
“Videojuegos tiene que ver con temas de seguridad”, expuso la presidenta de México, quien aclaró que no habrá prohibición, pero sí una estrategia de información y acompañamiento a padres de familia sobre el uso de estas plataformas.
Sheinbaum Pardo subrayó que estas medidas buscan incentivar hábitos más saludables y enfrentar problemas asociados a la ludopatía, la adicción a la nicotina y el consumo excesivo de azúcar, al tiempo que generan recursos para el sistema de salud.