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Noreste | Xalapa, Ver. | 14 Sep 2025 - 17:27hrs
La noche de este lunes 15 de septiembre, Veracruz vivirá uno de esos días que quedarán inscritos en la memoria colectiva:
Por primera vez, una mujer, la gobernadora Rocío Nahle García, será quien toque tres veces la campana del Palacio de Gobierno para dar el tradicional Grito de Independencia.
El eco de los “¡Viva México!” resonará de manera especial en la Plaza Lerdo de Xalapa, porque no solo se conmemorará el inicio de la gesta libertaria, sino también el avance en la participación política de las mujeres en Veracruz.
Resulta inevitable mirar hacia atrás y reconocer el camino que nos ha traído hasta aquí.
Las mujeres han estado presentes desde los albores de la Independencia: Josefa Ortiz de Domínguez alertando a los insurgentes, Leona Vicario financiando la causa, Mariana Rodríguez del Toro conspirando en defensa de la libertad.
Durante la Revolución Mexicana, soldaderas y coronelas rompieron estigmas; más tarde, en 1953, las mexicanas conquistaron el derecho al voto.
En Veracruz, las veracruzanas dieron pasos firmes en la vida pública y, finalmente, en 2018 la paridad quedó consagrada en la Constitución.
Hoy, esas luchas encuentran un símbolo poderoso: la primera mandataria veracruzana encabezando una de las ceremonias más significativas del país.
La gobernadora Rocío Nahle ha reiterado que esta celebración será motivo de alegría y unidad.
En entrevista, adelantó que Xalapa vivirá una fiesta cultural y musical desde la tarde, con presentaciones folclóricas y bailables, para culminar con el Grito de Independencia, seguido por la Sonora Dinamita y la Original Banda Limón.
“Todos los mexicanos buscamos esparcimiento, felicidad y paz, y en eso estamos trabajando. Vamos a tener fiesta en paz el 15 de septiembre, todos invitados a Xalapa”.
El 15 de septiembre no será una noche más.
Será la primera vez que una mujer veracruzana, elegida democráticamente para encabezar el Poder Ejecutivo, represente a todo el pueblo en esta ceremonia.
Un hecho que, además de festivo, tiene un peso histórico y social incuestionable.