Con información de Agencias | Canadá | 20 Jul 2025 - 18:42hrs
Patricio O’Ward finalmente conquistó uno de los circuitos más esquivos de la IndyCar: el callejero de Toronto. Con una carrera impecable, el piloto mexicano se llevó el triunfo en tierras canadienses, su segunda victoria de la temporada 2025 y la novena en su trayectoria dentro de la categoría.
Desde el décimo lugar en la parrilla, el regiomontano fue escalando posiciones en una jornada cargada de adrenalina, accidentes y decisiones estratégicas que marcaron la diferencia. Su equipo, Arrow McLaren, apostó por una parada anticipada para cambiar los neumáticos blandos, jugada que coincidió con el accidente de Alexander Rossi y la primera bandera amarilla del día. Mientras muchos ingresaban a pits, O’Ward ya estaba de regreso en pista, metiéndose en el grupo puntero.
El caos no se detuvo ahí. Apenas con 36 vueltas completadas, un nuevo incidente encendió las alarmas cuando el auto de Jacob Abel terminó montado sobre el de Josef Newgarden, provocando otra bandera amarilla. Esta vez, los líderes Álex Palou y Scott Dixon pagaron el precio con detenciones que los relegaron al fondo del pelotón.
Con la pista despejada, O’Ward tomó el liderato pasado la mitad de la competencia y no lo soltó. Rinus VeeKay lo persiguió sin éxito, mientras que Palou apenas pudo rescatar el duodécimo lugar. El mexicano cruzó la meta en primer sitio bajo bandera amarilla, tras un último choque entre Nolan Siegel y Felix Rosenqvist.
Más allá del trofeo, la victoria tiene un sabor especial para el automovilismo mexicano. Fue en esta misma ciudad donde Adrián Fernández escribió su nombre en la historia al ganar en 1996 su primera carrera en la extinta CART. Hoy, O’Ward revive esa memoria y continúa forjando su propia leyenda.
El triunfo en Toronto no solo es una muestra de talento y estrategia, sino también un guiño al pasado glorioso del automovilismo tricolor y una promesa firme de lo que está por venir.
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