Argentina.- El próximo 22 de octubre se celebrarán las elecciones presidenciales y legislativas en Argentina, y el mismo día, Javier Milei cumplirá 53 años. Una coincidencia que podría ser un buen augurio para el polémico aspirante de extrema derecha que busca convertirse en el próximo presidente del país.

Milei, de la coalición La Libertad Avanza, ha logrado imponerse en la escena pública y mediática de la región. Es el candidato del que más se habla en vísperas de las presidenciales y a ello han contribuido ampliamente sus controvertidos videos en redes sociales. En uno de ellos, Milei aparece, por ejemplo, agitando una motosierra en medio de una multitud y, en otro, critica al papa Francisco por tener “afinidad con los comunistas asesinos”. También habla en la televisión de su vida sexual e, incluso, ha afirmado que fue “profesor de sexo tántrico”.

Las escenificaciones extravagantes le han permitido impulsar su figura en los medios y atraer votantes. En las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de agosto, fue el candidato más votado en Argentina, para sorpresa general, con el 29,86 % de los votos, seguido del candidato oficialista Sergio Massa (21,43%) y de la derechista Patricia Bullrich (16,81%). Así, pasó de ser un estrambótico personaje mediático a una real opción de dirigencia para Argentina.

«No vine a guiar corderos, vine a despertar leones”, lanzó Milei al ganar las PASO

El candidato es descrito como un Trump argentino y él mismo expresa su admiración por el expresidente estadounidense. Los dos no solo tienen en común varios puntos de su programa político (libre porte de armas, conservatismo social, libertarismo, anti-establishment, etc.) sino también su estrategia de comunicación en redes sociales. Además, Milei, como Trump, ha sido señalado por hacer comentarios misóginos en público y faltarle al respeto a periodistas. El candidato argentino es, además, admirador del partido español de extrema derecha Vox.

Milei prendió la motosierra 😱

Javier Milei y Carolina Píparo encabezaron una caravana en Olavarría pic.twitter.com/9hOjJWTz1M

— El Economista (@ElEconomista_) September 15, 2023

El programa político de Milei se define por un conservadurismo duro sobre los temas sociales y un “ultraliberalismo” económico. Sus propuestas incluyen fuertes recortes al gasto público, la supresión de más de la mitad de los ministerios del país, la dolarización de la economía y el fin del Banco Central. También está a favor de la libre venta de órganos y la supresión de la ley que permite la interrupción voluntaria del embarazo.

De polémico comentarista económico a político antisistema
Javier Milei nació en Buenos Aires, en 1970, y creció con un padre violento y una madre ama de casa. En 2018, contó en un programa de televisión que ya no tiene contacto con sus padres. Explicó que su progenitor le provocaba mucho estrés en la universidad para verlo fracasar, pero aseguró que esa situación familiar lo fortaleció. “Para mí, los dos (padres) están muertos”, afirmó Milei.

Por otro lado, tiene una hermana, Karina, que lo apoyó y trabajó a su lado a lo largo de su carrera. Milei dijo que ella sería la “primera dama” en caso de ser elegido presidente.

Otra parte central de la vida de Milei son sus mascotas, que reconoce como “su verdadera familia”. Tiene cinco perros, cada uno con nombre de economista y a quienes dedicó su victoria en las PASO.

«Le quiero dar las gracias (…) a mis hijitos de cuatro patas. A Conan, a Murray, a Milton, a Robert y a Lucas»

El diputado y economista empezó a hacerse conocer en 2016 en los platós de televisión, donde compartía sus análisis económicos y sus propuestas políticas extremas, criticando a la clase política.

En 2019, se unió al Partido Libertario, un partido de derecha con una ideología de liberalismo económico, del cual ha sido el líder desde entonces.

En 2021, se conformó la coalición La Libertad Avanza, también liderada por él y definida por un conservadurismo duro, libertarismo económico, antikirchnerismo y antisistema. Con esta coalición, Milei fue elegido diputado de la Cámara de Diputados de la Nación, puesto que sigue ocupando.

Ahora, el polémico diputado busca llegar a la Presidencia de Argentina junto a Victoria Villarruel, su fórmula a la Vicepresidencia.

La diputada y número dos de La Libertad Avanza es abogada. Trabaja sobre temas de derechos humanos y creó hace más de 15 años una asociación de “memoria completa” para llamar la atención sobre las víctimas del terrorismo durante la dictadura.

Hija de un militar, es conocida por relativizar los crímenes perpetrados durante la última dictadura (1976-1983), como el número de desaparecidos, y querer cambiar el discurso de memoria al respecto. Villarruel tendría bajo su responsabilidad los ministerios de Defensa y Seguridad y promete ampliar el presupuesto militar.

La promesa de acabar con la “casta política”
El caballo de batalla de Milei es la propuesta de un cambio drástico en la política argentina y una alternativa al bipartidismo de izquierda y derecha que se ha repartido el poder desde el final de la dictadura militar en 1983.

“Hemos logrado construir esta alternativa competitiva que no solo dará fin al kirchnerismo, sino que además dará fin a la casta política parasitaria chorra e inútil que hay en este país”, gritó en su discurso de victoria tras las primarias de agosto.

Milei se opone particularmente al kirchnerismo, continuidad del peronismo, y cuya líder, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, está en el centro de la vida política de los últimos años. Milei acusa a menudo a la actual vicepresidenta de ser el origen de los problemas que vive Argentina. Cristina Fernández de Kirchner fue declarada culpable de corrupción el año pasado y condenada a seis años de cárcel, aunque se beneficia de una inmunidad temporal por su cargo de vicepresidenta.

«El problema argentino es que la solución está en manos del problema: los políticos”, es otra frase famosa del candidato.

Para muchos argentinos, Javier Milei representa la esperanza de un mejoramiento económico en un país donde la población sufre cotidianamente las consecuencias de la inflación, que fue, en agosto, la más alta en 32 años, y donde crece la pobreza.

Sin embargo, el candidato, que se define como el “outsider” de esta elección y que se niega, en principio, a pactar con cualquiera de la “casta política”, podría carecer de apoyos en el Congreso para hacer pasar sus reformas.

Durante las elecciones generales de octubre, además de elegir al nuevo o la nueva presidenta del país, se elegirán 130 de los 257 diputados, así como 24 de los 72 senadores. Aunque se prevé que el partido de Milei se imponga como una fuerza política del Congreso, estaría lejos de poder alcanzar una mayoría, lo que le haría imposible gobernar sin negociar con otros partidos. Actualmente, La Libertad Avanza cuenta con solo tres diputados y no cuenta con ningún senador.

Un conservadurismo social duro
Milei generalmente defiende valores sociales conservadores. Ha expresado su desacuerdo respecto a la ley que protege el derecho al aborto en Argentina desde 2021 y defiende “el derecho a la vida desde la concepción”. Otra propuesta que podría hacer retroceder los derechos de las mujeres, así como los de las minorías, es su voluntad de suprimir el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.

Milei también quiere eliminar la educación sexual en las escuelas porque, según dijo al canal de televisión ‘Todo Noticias’, esta “deforma la cabeza».

En términos de defensa y seguridad (ámbito de su posible vicepresidenta), prevé revalorizar el rol de las Fuerzas Armadas y bajar la edad de imputabilidad para hacer frente a los delitos de menores.

Milei también se ha pronunciado a favor del libre porte de armas.

Finalmente, desea privatizar las cárceles del país, donde los presos trabajarían para pagar su estadía.

Milei desea, asimismo, suprimir la cartera del Ambiente y Desarrollo Sostenible, Cultura y Transporte y fusionar los ministerios de Salud, Educación y Desarrollo Social en otro llamado Capital Humano.

También dijo querer privatizar el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), un importante organismo con miles de investigadores que representa el corazón de la ciencia y tecnología del país. El Conicet depende del Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación, otro de los ministerios que quiere cerrar el candidato.

Respecto a la educación, Milei aboga para que se tenga que pagar para acceder a ella. Propone un sistema de cheques distribuidos a los padres si quieren escolarizar a sus hijos. También se expresó a favor del fin de la obligatoriedad de la educación, diciendo a Radio ‘Mitre’ que “el sistema de la obligación no funciona”.

En el tema de salud, el candidato tiene un plan parecido al de la educación, en el cual son los pacientes quienes pagan por sus servicios con cheques. Para él, eso permitiría que el Estado deje de subvencionar a los hospitales y que ellos compitan para ofrecer el mejor servicio posible intentando tener más pacientes y así, más dinero. Aunque varios expertos han dicho que esta propuesta es interesante, dudan de su aplicabilidad y de sus resultados.

¿Qué es el libertarismo económico propuesto por Milei?
Según Milei, si los últimos gobiernos no han logrado frenar la crisis económica, reducir la inflación y aumentar el nivel de vida de los argentinos, sus propuestas económicas “ultraliberales” podrán sanar la economía. Milei se define como “anarcocapitalista” y defiende una lógica de libre mercado sin control o intervención del Estado, lo que lo lleva a calificar la justicia social de “aberración” y “robo”.

Una de las primeras medidas económicas de Milei sería una reducción del gasto público del 15 % del PIB, con algunos recortes sociales y varias privatizaciones, como la de Aerolíneas Argentinas o la compañía de agua AySA.

El candidato de extrema derecha dice que desea liberalizar la economía, suprimiendo las regulaciones de importación o exportación de productos, reduciendo los impuestos, flexibilizando el mercado laboral y fomentando la inversión privada.

Incluso se ha mostrado a favor de la libre venta de órganos, una propuesta poco realista, debido a la legislación del país, y contraria a los principios de la Organización Mundial de la Salud, por lo que ha creado polémica.

La gran propuesta económica de Milei para acabar con la inflación constante en el país es la dolarización de la economía lo más pronto posible. Para el candidato, cambiar al dólar permitiría el fin de la devaluación de la moneda y el alza del poder adquisitivo.

Sin embargo, expertos económicos advirtieron del riesgo que constituye depender de la política monetaria de otro país, de la posibilidad de tener aún más inflación al inicio de la reforma y del riesgo de una desestabilización de la economía.

Además de necesitar el apoyo del Congreso para tal reforma, también se requieren reservas de dólares, algo de lo que carece Argentina, aunque el candidato a la Presidencia aseguró en X haber encontrado los dólares necesarios, sin precisar dónde o cómo.

En una entrevista con ‘Infobae’, Carlos Rodríguez, a quien Milei eligió como jefe de asesores económicos en caso de una victoria, admitió que la dolarización no se podría hacer próximamente.

“La tendencia es dolarizar y yo estoy de acuerdo. Pero en campaña se dicen muchas cosas y que se pueda dolarizar el 10 de diciembre es una imposibilidad. Y tampoco en 2024. Eso lo sabemos todos. No se puede”, confió Rodríguez.

Finalmente, Milei propone “dinamitar el Banco Central”. El candidato aseguró en una entrevista con ‘El País’, que “Argentina llegó a ser el país más rico del mundo cuando no tenía Banco Central”.

Sin embargo, Rodríguez también expresó reservas sobre este punto y afirmó que “eso es un eslogan de campaña (…) Hay que tirarlo abajo, pero de buena manera.”

Aunque muchas de las propuestas de Milei tienen más de marketing político que de aplicabilidad, ha dejado claro a los argentinos que pretende cambiar radicalmente el funcionamiento de la administración si llega a la Casa Rosada, un escenario ya no tan lejano que podrá tomar forma, o perderla, en la primera vuelta del 22 de octubre.

Con información de France 24