ALMA GRANDE
Por Ángel Álvaro Peña
Como si se tratara de un líder de opinión o de alguien que pudiera ser una autoridad en la equidad de género, Santiago Creel Miranda, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, externó su disgusto por la decisión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que obliga a los diputados a que conformen una quinteta exclusivamente integrada por mujeres para elegir a una presidenta consejera del INE.
“El tema con la orden del TEPJF de que sea una mujer la nueva presidenta del INE va más allá del tema del género”, dijo Creel Miranda y agregó que esta orden se trata de la “intromisión de un Tribunal en una soberanía”.
Aquí es donde no se entiende su concepto de soberanía del diputado y ex secretario de Gobernación, porque ha habido otros fallos del tribunal electoral que afectan la autonomía y se ha quedado callado.
En momentos en que la participación de la mujer en la vida del país, dentro y fuera de la administración pública Santiago Creel se indigna porque deberá ser una mujer la consejera presidenta del INE, sin mayor explicación que la supuesta “intromisión a la soberanía”.
Esta es de las pocas veces en las que Santiago Creel cuestiona al Tribunal Electoral, que siempre ha sido benévolo con él y con sus aspiraciones políticas. La relación con esa instancia parece romperse luego de años de buenas relaciones, lo cual no deja de tener interpretaciones políticas muy graves.
La trayectoria de Creel no concuerda con su reacción actual Conservador siempre ha sido, pero llegar a los extremos que muestra ahora no deja de apreciarse como un acto suicida, toda vez que ha expresado públicamente su intención por ser candidato a la Presidencia de la República.
El conservadurismo de quien fuera candidato perdedor por la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, brinca en los peores momentos que puede tener una persona de derecha, ubicada en el conservadurismo.
La Sala Superior del Tribunal electoral, por mayoría de votos, el Acuerdo de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputaciones para el proceso para la designación del Comité Técnico de Evaluación, la Convocatoria para la elección de consejeras y consejeros electorales del Consejo General del INE y de sus criterios específicos de evaluación, al señalar que no se cumplía con la paridad de género en la presidencia del INE.
Pero Creel pareciera vivir en el pasado y exaltado afirmó que le genera “dudas” que el TEPJF se meta con las decisiones de la Cámara de Diputados, “ahí es donde está la duda”, comentó, como si anteriormente no hubiera habido reales intromisiones del tribunal electoral en el pasado, no sólo en las decisiones del Legislativo, sino en la vida de candidatos y partidos.
Es tiempo de pagar la deuda de marginación al darse a conocer la decisión del tribunal vio frustrada su estrategia, porque ahora habla de una invasión de facultades que nadie advierte más que Creel Miranda.
El Presidente opinó que “está muy bien”, porque “las mujeres suelen ser más honestas”, e hizo una defensa de la labor de las mujeres en la administración pública.
Existen precandidaturas que en algunos estados del país se rechaza la participación de la mujer por el simple hecho de ser mujeres. Es momento de reconocer que las mujeres estuvieron, en el pasado, al margen de las actividades que desde el poder machista se les negó. Anteriormente no se reconocía que la mujer puede realizar todas las actividades que el ser humano desarrolla en su vida cotidiana y la política no es la excepción.
Las mujeres en México empezaron a votar tardíamente en comparación a los hombres, su primera voluntad en las urnas la mostraron un 3 de julio de 1955, mientras que en Estados Unidos las mujeres podían votar desde 1920. Como estas tareas otras muchas que demuestran que se ha discriminado a la mujer y todavía hay rezagos que deben resolverse como el hecho de que tengan el mismo salario que los hombres desarrollando una misma función laboral.
Nada que pueda otorgar derechos a la mujer puede ser cuestionado en México, hacerlo es desconocer nuestra historia y se hace necesario recordar que, por muchos años, la mujer fue la servidumbre del hombre tanto en el hogar como en las actividades laborales, y esto nadie en este país debe olvidarlo y menos aún regatear los derechos de igualdad, porque hacerlo implica estar contra la democracia.
Las mujeres demostraron su participación en la historia desde la Reforma, cuando se establece claramente las trincheras históricas del país entre liberales y conservadores.
Nadie concibe la Independencia de México sin la participación de doña Josefa Ortiz de Domínguez, o Leona Vicario; ni la revolución sin Carmen Vélez, La Generala, o Carmen Serdán. Las mujeres tienen un lugar en la historia que ellas adoptaron con valentía y convicción, exactamente igual que los hombres, sólo quienes desdeñan la historia o la desconocen pueden considerar espacios prohibidos para ellas.
Sería un contrasentido que, en el órgano regulador de las elecciones, que debe ser garante de la democracia se les cuestione, aunque sea de manera individual, el nombramiento para encabezarlo. Alguien que elabora, discute, aprueba leyes no puede ser un obstáculo para la igualdad; sin embargo, hay personajes que muestran una posición del pasado, en pleno siglo XXI, donde expresan molestia por la equidad.
No hay democracia sin igualdad, y esto que lo diga un legislador resulta muy grave porque muestra no sólo desconocimiento de las leyes y el derecho sino una cerrazón que contraviene con los tiempos que vive México y el mundo.
Actualmente hay siete gobernadoras en el país, después de este año habrá una más en el Estado de México. Probablemente haya una Presidenta de la República.
Griselda Álvarez Ponce de León fue la primera gobernadora de la historia en Colima en el sexenio de 1979 a 1985, luego le siguió Beatriz Paredes Rangel de Tlaxcala de 1987 a1992, y le siguieron Dulce María Sauri Riancho, Rosario Robles Berlanga, Amalia García Medina, Ivonne Ortega Pacheco, Claudia Pavlovich Arellano, Martha Erika Alonso, Claudia Sheinbaum, entre otras mexicanas como Sor Juana Inés de la Cruz, la Güera Rodríguez, Ángel Peralta, “El Ruiseñor Mexicano”, Olga Sánchez Cordero, Alondra de la Parra, y muchas más.
Hay avances que deben reconocerse como cuando el actual Presidente cuando fue jefe de Gobierno, la mayoría de los integrantes del gabinete eran mujeres.
En el mundo entero podemos ver a la mujer a veces superando al hombre realizando tareas que estaban históricamente destinadas a varones.
A veces el pez por su boca muere y podemos ver cómo las aspiraciones de Santiago Creel por concursar por la Presidencia de la República, disminuyen rápidamente, a causa de sus propias declaraciones. Es como si no necesitara contrincantes.
PEGA Y CORRE
El INE invalida la ampliación de mandato al líder nacional del PRI, Alejandro Cárdenas Moreno, quien quería permanecer al frente del partido hasta 2024, debiendo dejar su cargo este año… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
Esta es opinión personal del columnista
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